Nita es una niña de 11 años que vive en los años ochenta. Agosto, sol, juegos, diversión y baños en su bonito pueblo pesquero chocan con un mundo cruel, fantástico y demoledor. Deberá luchar por sus seres queridos descubriendo secretos sorprendentes sobre el entorno que la rodea y sobre sí misma.
Así reza la sinopsis de esta maravillosa obra, pero sin duda es mucho más. Un viaje a nuestro pasado, donde vivíamos una vida más sencilla y apacible, que sin duda nos retrotraerá una apacible nostalgia que debemos paladear con calma y sosiego. Ambientada en la costa guipuzcoana, un marco incomparable, y uno de los lugares más hermosos de la geografía española, nos retrata un contexto diferente, con sus propias particularidades, y con el que desarrollaremos cierta empatía con mucha rapidez. Enfocar una historia de fantasía en un infante es un acierto por parte del autor. La perspectiva maravillosa de un niño, o de una niña en este caso, nos ofrece un punto de ilusión e ingenuidad que nos hará sentirnos niños de nuevo, o al menos entresacar nuestro espíritu juvenil de la coraza que solemos recubrirlo los adultos.
Nita, es una niña que ha pasado por un severo trauma -la desaparición de su padre-, pero cuya entereza es un pilar fundamental para que su madre supere el amargo trago de su ausencia, y ambas, como familia puedan continuar con sus vidas. La entereza y fortaleza de Nita es algo maravilloso. Su desbordante imaginación, su conexión con sus amigos y un entorno de libertad y pureza hacen de este cuento una magnífica lectura. ¿Hay una forma mejor de conducirnos por una historia de encanto y magia? El enfoque sobrenatural que nos ofrece el autor, con una íntima conexión con la madre naturaleza, es sencillamente brillante, y los encuentros con el no dragón nos deparan momentos hermosos y memorables. En definitiva, una historia magistralmente conducida, que nos invita a confiar en nuestros infantes, y darles una oportunidad para ser nuestros amigos y confidentes, además de nuestros héroes.
Un cuento perfecto, que no podemos dejar de disfrutar, y que nos convierte en auténticos fans de Nita y sus amigos, sumiéndonos en una profunda impaciencia por seguir disfrutando de sus aventuras, que esperamos que lleguen a nosotros muy pronto.