sábado, 4 de enero de 2020

AWEN: Viajeros de la noche —Alejandra de San Cristóbal

Increíble. Impresionante. Sublime. Maravillosa. Los adjetivos se agotan para calificar a esta magnífica obra. Apta para todas las edades, pues la disfrutaremos por igual mayores, jóvenes y pequeños. Un libro mágico, que nos va a recordar a las mejores novelas de literatura que hemos leído en nuestra infancia. No se parece a ninguna en concreto, pero tiene un poco de esa magia que atesoraban joyas como La historia interminable, Momo y los hombres grises, Las crónicas de Narnia e incluso Los viajes de Gulliver. Si tenéis hijos, si deseáis que aprendan a amar la lectura y todos los mundos maravillosos que estos nos ofrecen, corred a comprar esta obra que os fascinará y maravillará a partes iguales. 



La autora nos ofrece un punto de partida con el que podemos sentirnos cómodos e identificados con rapidez. Partimos de un mundo real y familiar, que conocemos como la palma de nuestra mano, en una situación que podemos comprender y empatizar de inmediato. Es un punto comparte con las las obras maestras ya citadas. Una mezcolanza exquisita. Y acompañaremos a Fran en un viaje singular a una tierra extraña. Una lugar misterioso y desconocido, repleto de posibles aventuras y en el que le veremos revelar la verdadera esencia de su personalidad, una que ni siquiera él conocía realmente. La conexión con la otra protagonista es inmediata, y seremos mudos testigos de la complicidad entre ambos a medida que van pasando tiempo juntos. Xyla es un personaje con muchísima fuerza, alegría y coraje, que nos servirá de cicerone en un mundo maravilloso, repleto de criaturas fantásticas, dignas de la Fantasía de Ende. Nos encontramos con un pueblo alegre, optimista y feliz, en armonía con la naturaleza que les rodea. Un regalo para nuestros hijos, una enseñanza valiosa e imprescindible. Viviremos aventuras, pasaremos momentos realmente divertidos y disfrutaremos cada página como los niños que somos, recordando los días más felices de nuestra vida.




Alejandra de San Cristóbal demuestra un dominio total de los tiempos y del ritmo narrativo. Conoce a la perfección cómo construir una atmósfera e historia atractivas, y sabe como ofrecernos una lectura de lo más amena y entretenida, ideal para que los niños viajen a un mundo dónde pueden dejar volar su imaginación. Nos regala momentos muy divertidos, y el tono es hermoso, apacible, lleno de vida, pero intercala con maestría el dramatismo que toda historia necesita para prosperar de forma adecuada. No obstante, hay que recalcar que el espíritu jovial y la alegría predomina en esta maravillosa aventura. Los detalles que atañen tanto del mundo que conocemos, como el destino del viaje son ricos, y están retratados a la perfección y encajan como un guante con la psique de los personajes que lo pueblan. El desarrollo y desenlace harán la delicia de los lectores, pues está planteado de forma magistral y brillante. Nos deja deseosos de ir corriendo a adquirir el segundo volúmen de Awen. Os aconsejo que lo hagáis de inmediato. Eso fue lo que yo hice. ¡Una maravilla! De lo mejor que he leído nunca en fantasía para jóvenes. ¡No la dejéis escapar!

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