sábado, 23 de mayo de 2020

El maestro de ilusiones — Alejandra de San Cristóbal

Acabo de terminar la lectura del cuarto libro de Alejandra de San Cristóbal, y puedo afirmar de forma categórica que no decepciona. Vale cada segundo que inviertes en él, es una obra para disfrutar de principio a fin y que goza del estilo característico de esta gran escritora, y podremos encontrar elementos que ya disfrutamos en la trilogía de Awen, a pesar de ser obras conceptualmente muy diferentes. Una novela que avanza con paso firme en el PLA y a la que le auguro un gran éxito.




La autora nos lleva a un mundo fascinante, y nos regala una vez más su habilidad, fuera de lo común para conectar con los personajes que habitan en la novela, siempre planteando situaciones interesantes y enigmáticas entremezcladas con otras divertidas, que nos harán pasar un rato muy divertido. Hay un misterio que resolver, y ser partícipes de cómo los personajes van haciendo progresos en la tarea es una maravilla para el lector. La autora es una experta en la confección de puzzles y acertijos, como ya dejó patente en su anterior trabajo, y es una parte refrescante y amena, que nos hará sentir una parte importante de la trama. 




El libro nos transporta al maravilloso mundo del ilusionismo, un entorno fabuloso que nos invita a soñar despiertos, tener nuestra mente abierta y aceptar que la posibilidad de realizar prodigios es tangible y real. La atmósfera que nos envuelve nos recuerda en ciertos tramos a la que vimos en la película El truco final (2006), y también veremos flashbacks, colocados por la autora de forma magistral y que resultan fundamentales para el desarrollo de la obra, dándonos un contexto que vale oro. Nos acerca a la figura de una leyenda, conocida por todos, incluso para los profanos en este fascinante tema. ¿Cómo resistirse a una novela dónde conoceremos un poco mejor al gran Harry Houdini? Tenemos un meticuloso trabajo de investigación, desarrollado forma magistral que encaja con todas las piezas dispuestas sobre el tablero de juego. 



El trío protagonista rebosa de carisma, y sus diferentes personalidades encajan como un guante, otorgándole a la obra una riqueza y dinamismo imprescindibles en su desarrollo. Quieres saber todo sobre ellos y cada detalle que nos da la autora es un sorbo de exquisitez. En definitiva se trata de una novela para disfrutar cada segundo, rápida, amena  y divertida, una historia que nos hace soñar y conectar con el niño que llevamos en nuestro interior. Un aura de optimismo y positivismo nos embriaga, una característica muy personal de la autora, que plasma con maestría. Personalmente espero encarecidamente que esto no acabe aquí y que la autora nos permita seguir soñando con ella y sus maravillosos personajes. 


Entrada importante

Dos damas con carácter: conociendo a Eva —Cristy Herrera

Cada nuevo paso de la autora dentro de la literatura es una confirmación de lo que ha venido apuntando desde sus primeros pasos. Cada manusc...